Tras bombardeos en Medio Oriente, Biden amenaza con ampliar ofensiva a suelo iraní

Tras dos intensas jornadas de ataques aéreos contra objetivos de grupos armados proiraníes en Siria, Irak y Yemen, el presidente Joe Biden advirtió que Estados Unidos no descarta emprender nuevas acciones, incluso en territorio de Irán, en represalia por agresiones recientes contra intereses americanos en la región.

En una misiva dirigida al Congreso este domingo, Biden defendió como "necesarias y proporcionadas" las incursiones para neutralizar bastiones de la radical Guardia Revolucionaria iraní (IRGC), en respuesta al "grave riesgo" que esta representa contra fuerzas e instalaciones estadounidenses en Medio Oriente.

Y fue aún más lejos al afirmar que, "de ser preciso", está dispuesto a ordenar medidas adicionales, apuntando directamente a bases e integrantes del IRGC en suelo persa, en ejercicio del "derecho a la legítima defensa" que le confiere la Carta de la ONU.

El endurecimiento del discurso de Biden se produjo poco después de que su asesor, Jake Sullivan, reafirmara a medios locales la intención de "realizar ataques y acciones extras" contra grupos patrocinados por Teherán, luego de que agresiones recientes les costaran la vida a tres militares en Jordania.

Los bombardeos del fin de semana, que según Washington eliminaron a unos 85 blancos radicales, son interpretados como un recio aviso al régimen de los ayatolás sobre las consecuencias de seguir auspiciando atentados contra intereses americanos a través de sus proxies regionales.

Pero la Casa Blanca busca también marcar un límite a la escalada bélica, realizando incursiones quirúrgicas diseñadas para "evitar víctimas civiles" y no desencadenar un conflicto mayor, precisa Biden.

Visto el nulo efecto disuasorio de sanciones y amonestaciones previas, la gran interrogante ahora es si esta contundente demostración de fuerza finalmente moderará los designios desestabilizadores de Irán en la zona o si solo conseguirá encender aún más la mecha.