Cultura
RIP Stephen Sondheim, espíritu de una época
Stephen Sondheim murió hoy, en su casa de Roxbury, Connecticut. Tenía 91 años. Un extenso obituario de AP da cuenta de la distinguida trayectoria del compositor. Sondheim reconfiguró el teatro musical estadounidense en la segunda mitad del siglo XX "con sus letras inteligentes e intrincadamente rimadas, su uso de melodías evocadoras y su voluntad de abordar temas inusuales", indicó AP.
Noviembre 26, 2021 8:54pm
Updated: Noviembre 26, 2021 8:54pm
El compositor Stephen Sondheim influyó varias generaciones de compositores de teatro, lo hizo con musicales emblemáticos como "Company", "Follies" y "Sweeney Todd", son algunos de sus mejores trabajos. Su balada más famosa: "Send in the Clowns". Producida y reproducida cientos de veces, incluso por Frank Sinatra y Judy Collins, precisó AP.
Fue un artista que se negó a repetirse y que supo encontrar inspiración para sus espectáculos en temas tan diversos como una película de Ingmar Bergman ("A Little Night Music"), la apertura de Japón a Occidente ("Pacific Overtures"), el pintor francés Georges Seurat ("Sunday in the Park With George"), los cuentos de hadas de Grimm ("Into the Woods") y hasta asesinos de presidentes estadounidenses ("Assassins"), entre otros.
De su música y letras se ha dicho que dieron a sus espectáculos "un toque oscuro y dramático", antes de él, "el tono dominante de los musicales era efervescente y cómico", recordó AP. Sondheim empujó el musical hacia un lugar más oscuro, rico e intelectual. "Si piensas en una letra de teatro como una historia corta, como hago yo, entonces cada línea tiene el peso de un párrafo", escribió en su libro de 2010, "Finishing the Hat", el primer volumen de su colección de letras y comentarios.
Para los aficionados al teatro, "la sofisticación y la brillantez de Sondheim lo convirtieron en un icono". De hecho, un teatro de Broadway recibió su nombre y la portada de una revista neoyorquina llegó a preguntar: "¿Es Sondheim Dios?". El periódico The Guardian hizo alguna vez la siguiente pregunta: "¿Es Stephen Sondheim el Shakespeare del teatro musical?".
Ante la estatura del hombre que se ha ido, los homenajes que inundan las redes sociales por parte de intérpretes y escritores que despiden al "gigante del teatro". "Cantaremos tus canciones para siempre", escribió Lea Salonga. "Somos tan afortunados de tener lo que has dado al mundo", expresó Aaron Tveit. "El teatro ha perdido a uno de sus mayores genios y el mundo ha perdido a uno de sus más grandes y originales escritores. Lamentablemente, ahora hay un gigante en el cielo", indicó el productor Cameron Mackintosh.
Sondheim obtuvo premios Tony por seis musicales, incluido el de mejor partitura; también recibió un premio Pulitzer ("Sunday in the Park"), un premio de la Academia (por la canción "Sooner or Later" de la película "Dick Tracy"), cinco premios Olivier y la Medalla de Honor Presidencial. En 2008, recibió un premio Tony por los logros de su vida.
Fue un gran artista de la palabra y ávido practicante de los juegos de palabras: "Lo contrario de la izquierda es la derecha/Lo contrario de la derecha es el error/Así que cualquiera que sea de izquierdas está equivocado, ¿verdad?", escribió en "Anyone Can Whistle". En "Company", escribió las líneas: "Las cosas buenas mejoran/las malas empeoran/espera, creo que quise decir eso al revés".
En su primer volumen de letras reunidas ofreció los tres principios necesarios para un compositor: el contenido dicta la forma, menos es más y Dios está en los detalles. Todos estos axiomas , escribió, están "al servicio de la Claridad, sin la cual nada más importa".
Al principio de su carrera, Sondheim escribió las letras de dos espectáculos considerados clásicos de la escena estadounidense: "West Side Story" (1957) y "Gypsy" (1959). "West Side Story", con música de Leonard Bernstein, transportó "Romeo y Julieta" de Shakespeare a las calles y pandillas de Nueva York. "Gypsy", con música de Jule Styne, contó la historia tras bastidores de Gypsy Rose Lee.
En 1962, Sondheim escribió la música y la letra de un espectáculo de Broadway, que resultó ser un éxito: "A Funny Thing Happened on the Way to the Forum", protagonizado por Zero Mostel en el papel de un astuto esclavo de la antigua Roma que anhela ser libre.
"Company", estrenada en Broadway en abril de 1970, cimentó la reputación de Sondheim. Las aventuras de un soltero (interpretado por Dean Jones) incapaz de comprometerse en una relación fueron aclamadas por capturar la naturaleza obsesiva de los esforzados y egocéntricos neoyorkinos. El espectáculo, producido y dirigido por Hal Prince, le valió a Sondheim su primer premio Tony a la mejor partitura.
Sondheim nació el 22 de marzo de 1930 en el seno de una familia acomodada, fue el único hijo del fabricante de ropa Herbert Sondheim y de Helen Fox Sondheim. A los 10 años, sus padres se divorciaron y la madre de Sondheim compró una casa en Doylestown, Pensilvania, donde uno de sus vecinos era el letrista Oscar Hammerstein II, cuyo hijo, James, fue compañero de habitación de Sondheim en el internado. Fue Oscar Hammerstein quien se convirtió en el mentor profesional del joven y en un buen amigo.
Tuvo una infancia solitaria, su madre vertió contra él abusos verbales. A los 40 años recibió una carta de ella en la que le decía que se arrepentía de haberle dado a luz. Siguió apoyándola económicamente y viéndola de vez en cuando, pero no asistió a su funeral.
Sondheim asistió al Williams College de Massachusetts, donde se especializó en música. Tras su graduación, recibió una beca de dos años para estudiar con el compositor de vanguardia Milton Babbitt.
El compositor escribió con poca frecuencia para el cine. Colaboró con el actor Anthony Perkins en el guión de la película de misterio y asesinato "The Last of Sheila" (1973), y además de su trabajo en "Dick Tracy" (1990), escribió partituras para películas como "Stavisky" (1974) de Alain Resnais y "Reds" (1981) de Warren Beatty. A lo largo de los años, ha habido muchas reposiciones en Broadway de espectáculos de Sondheim. Asimismo, las canciones de Sondheim se han utilizado ampliamente en reestrenos.
Un documental de HBO dirigido por Lapine, "Six by Sondheim", se emitió en 2013 y reveló que le gustaba componer tumbado y que a veces disfrutaba de un cóctel para relajarse mientras escribía. Incluso reveló que sólo se enamoró realmente después de cumplir los 60 años, primero del dramaturgo Peter Jones y luego, en sus últimos años, de Jeff Romley.
En septiembre de 2010, el Henry Miller Theatre pasó a llamarse Stephen Sondheim Theatre. "Estoy profundamente avergonzado. Estoy emocionado, pero profundamente avergonzado", dijo ante decenas de admiradores que aplaudían en Times Square. Luego reveló su vena perfeccionista: "Siempre he odiado mi apellido. Simplemente no canta".
"No sólo sus musicales son brillantes, sino que no puedo pensar en otra persona de teatro que haya hecho una crónica tan elocuente de toda una época", dijo David Ives al calificarlo de genio en 2013. "Es el espíritu de la época en cierto modo".