Principales fabricantes de automóviles de Estados Unidos anuncian que no impondrán la obligación de vacunarse

En una declaración conjunta emitida el miércoles, General Motors, Ford y Chrysler anunciaron que no impondrán la vacunación a sus miles de empleados, pero continuarán exigiendo el uso de mascarillas tras las negociaciones con el sindicato United Auto Workers (UAW).

Aunque la declaración anima a los trabajadores sindicalizados a informar de su estado de vacunación, la notificación es discrecional.

"El Grupo de Trabajo sigue instando a todos los miembros, compañeros de trabajo y sus familias a que se vacunen y reciban refuerzos de la vacuna contra el Covid-19, aunque entiende que hay razones personales que pueden impedir que algunos miembros se vacunen, como problemas de salud o creencias religiosas", señala la declaración.

Sin embargo, la Administración Biden presiona para que las empresas impongan la obligación de vacunarse como mecanismo de lucha contra la propagación del virus.

El martes, la Casa Blanca pidió a un tribunal federal de apelaciones levantar una orden que detuvo los requisitos de vacunación y pruebas para las empresas privadas.

Según un informe de la CNBC, el Departamento de Justicia dijo al Tribunal de Apelaciones del Sexto Circuito de los Estados Unidos que "la amenaza para los trabajadores es continua y abrumadora", ya que las oficinas siguen reabriendo al tiempo que siguen apareciendo nuevas variantes.

Esta semana, científicos de Sudáfrica anunciaron el descubrimiento de una nueva variante, conocida como B.1.1.529, y dijeron que está relacionada con el aumento exponencial de las infecciones.

"En pocas palabras, retrasar la norma costaría probablemente muchas vidas diariamente, además de un gran número de hospitalizaciones, otros efectos graves para la salud y enormes gastos. Se trata de una confluencia de daños de primer orden", argumentó el Departamento de Justicia.

Pero si la vacunación obligatoria no está sobre la mesa, el gobierno Biden sí espera que los tribunales permitan al menos mantener los requisitos de uso de mascarillas y pruebas o test para los trabajadores no vacunados.

"Aunque la vacunación es el medio más eficaz para mitigar el grave peligro del Covid-19 en el lugar de trabajo, el uso de mascarillas y las pruebas para los empleados no vacunados es una alternativa razonablemente eficaz", dijo la administración al tribunal.

El gobierno Biden se vio impedido de aplicar su mandato de vacunación y pruebas por una orden del Tribunal de Apelación de los Estados Unidos para el Quinto Circuito. En una opinión para un panel de tres jueces, el juez Kurt D. Engelhardt dijo que la política era "fatalmente defectuosa" y "asombrosamente exagerada" y que plantea "serias preocupaciones constitucionales".