"No apreté el gatillo", dice Alec Baldwin

Alec Baldwin niega insistentemente haber apretado el gatillo de la pistola que se disparó en el set de Rust y que mató a la directora de fotografía Halyna Hutchins, según el avance de una entrevista exclusiva con el actor que se emitirá el próximo jueves en la noche.

En el clip, George Stephanopoulos, de ABC News, dice: "No estaba en el guion que se apretara el gatillo".

"Bueno, el gatillo no se apretó, yo no apreté el gatillo", responde Baldwin.

"¿Así que no apretaste el gatillo?" pregunta Stephanopoulos.

"No, no, no. Nunca apuntaría a nadie con un arma y apretaría el gatillo, nunca", asegura Baldwin.

El clip se muestra sin el contexto. La entrevista completa se emitirá el jueves 2 de diciembre a las 8 p.m., en ABC.

La última declaración de Baldwin parece contradecir el testimonio proporcionado por el director de Rust, Joel Souza, quien dijo a un investigador que el disparo se produjo mientras ensayaba una escena en la que Baldwin saca y apunta el arma directamente a la cámara.

Después de practicar cómo iba a "desenfundar" el revólver, cruzándolo por delante de su cuerpo, Baldwin dijo: "Así que, supongo que voy a sacar esto y hacer ¡Bang!".

Souza estaba de pie detrás de la cámara, con Hutchins y el camarógrafo, cuando el arma se disparó. Hutchins fue herida en el pecho y declarada muerta en el hospital. Souza la atrapó al caer y también fue herido en el hombro por la explosión que describió como un sonido de "un látigo y un estallido".

El rodaje de Rust se detuvo tras el incidente.

Rust es un proyecto de Baldwin, con un presupuesto de 7 millones de dólares, mucho menor que el de los proyectos habituales de la estrella. El ajustado presupuesto ha llevado a la producción y al equipo de rodaje a sus límites. Seis miembros del equipo se retiraron del rodaje por falta de salario y condiciones laborales.

Algunas de las quejas indicaron que no se cumplían estrictamente los protocolos de seguridad, incluidas las inspecciones de las armas. Las armas en el plató debían ser inspeccionadas primero por la armadora Hanna Gutierrez-Reed, y después por el ayudante de dirección David Halls, quien las entregaba a los actores. Sin embargo, los actores recibieron las armas tanto de Halls como de Gutierrez-Reed, en contra de la norma de la industria de una secuencia precisa de inspecciones.

Tanto Gutiérrez-Reed como Halls se convirtieron en figuras clave de la investigación, junto con Seth Kenney, un especialista local en armas que fue contratado como "mentor del armero". Este era el segundo trabajo de Gutiérrez-Reed como armero principal en filmación.

Thell Reed, un famoso armero de Hollywood y padre de Gutiérrez-Reed, proporcionó un dato a las fuerzas del orden indicando que los cartuchos reales pudieron ser los que él le había dado a Kenney a principios de año para utilizarlos en otro proyecto.

Según una declaración jurada, Guttierez-Reed dijo que Kenney "suministró la munición y las armas al set de Rust".