Miles de usuarios se quedan incomunicados tras fallas masivas en tedes de telefonía

Una ola de fallas en las redes de telefonía móvil de Estados Unidos dejó a decenas de miles de usuarios temporalmente incomunicados este jueves, en un incidente que permanece bajo investigación por parte de agencias federales de seguridad y comunicaciones.

Según informó John Kirby, vocero de la Casa Blanca, tanto la Comisión Federal de Comunicaciones como el Buró Federal de Investigaciones y el Departamento de Seguridad Nacional se encuentran indagando las causas del fenómeno, el cual, según registros de la plataforma DownDetector, provocó más de 70 000 interrupciones en la red de la empresa AT&T.

"La Comisión Federal de Comunicaciones ha estado en contacto con AT&T y esas consultas continúan mientras tratan de entender qué ocurrió realmente", expresó Kirby, agregando que "no creo que todas las redes se hayan restablecido, pero tengo entendido que todo en AT&T funciona completamente ahora".

De acuerdo a los datos recopilados, los incidentes en AT&T alcanzaron un pico superior a las 73 000 fallas cerca del mediodía y afectó principalmente a usuarios en las ciudades de Houston, Chicago, Dallas, Atlanta, San Antonio, Indianápolis, Los Ángeles, Miami y Louisville.

Por su parte, la firma Verizon registró alrededor de 4 100 interrupciones de servicio, mientras que la compañía T-Mobile reportó cerca de 2000 inconvenientes. El 51% de los reportes correspondieron a falta de señal en teléfonos móviles, mientras que un 40% denunció interrupción total y un 9% se refirió a problemas en el acceso a internet móvil.

En un comunicado emitido por la tarde, AT&T confirmó que el servicio ya había sido restituido para todos los clientes afectados y ofreció disculpas por las molestias ocasionadas.

"Mantener a nuestros usuarios conectados continúa siendo nuestra mayor prioridad, y estamos tomando medidas para asegurar que nuestros clientes no vuelven a experimentar algo así", afirmó la empresa, sin brindar detalles sobre las causas del incidente.

La situación obligó a varias agencias locales de emergencia, como los servicios 911 en los condados de Prince William (Virginia) y San Francisco (California), a emitir alertas advirtiendo sobre la imposibilidad de comunicarse a través de las redes móviles de AT&T y recomendando el uso de teléfonos fijos ante cualquier eventualidad.

Si bien el servicio fue restablecido en cuestión de horas, el episodio evidencia la enorme dependencia de la sociedad contemporánea de las redes de comunicación móvil y la necesidad de que las empresas implementen mayores medidas de seguridad para evitar vulnerabilidades que puedan provocar este tipo de disrupciones masivas.