Inmigración
La congresista Salazar propone la "Ley de Dignidad" para solucionar crisis migratoria
La congresista María Elvira Salazar asegura que el sistema de inmigración está fracturando a Estados Unidos
Febrero 8, 2022 1:23pm
Updated: Febrero 8, 2022 2:15pm
La congresista de Florida, María Elvira Salazar, presentó la Ley de Dignidad, un proyecto de reforma migratoria integral que consta de tres principios fundamentales: detener la inmigración ilegal, ofrecer una solución digna a los inmigrantes que viven en Estados Unidos y fortalecer la fuerza laboral y la economía estadounidenses.
El Proyecto de Ley de 483 páginas, propuesto por primera vez por la congresista republicana cubanoamericana en marzo de 2021, establecería numerosos cambios en el sistema de inmigración y un nuevo programa de residencia legal para millones de inmigrantes indocumentados.
"Nuestro sistema de inmigración roto está fracturando a Estados Unidos: económica, moral, social y políticamente. Está amenazando el Sueño Americano y nuestra propia forma de vida", dijo Salazar el martes.
"Hoy presento la Ley de Dignidad para asegurar nuestra frontera, proporcionar una solución digna a los inmigrantes en Estados Unidos y apoyar a los trabajadores estadounidenses. Aunque somos una nación de leyes, también somos una nación de segundas oportunidades. Agradezco a mis colegas que se unan a mí para mantener vivo el sueño americano", añadió.
Según Salazar, la nueva legislación serviría para frenar la inmigración ilegal al tiempo que proporcionaría dignidad a los inmigrantes indocumentados que ya residen en Estados Unidos.
"Pueden salir de las sombras y vivir una vida digna", dijo Salazar a los periodistas en una llamada el martes por la mañana.
A través del "Programa de Dignidad", los inmigrantes indocumentados que lleven 5 años en Estados Unidos podrán permanecer en el país y trabajar legalmente.
Siempre que aprueben una verificación de antecedentes penales, paguen los impuestos atrasados, comiencen a pagar los impuestos sobre la renta y paguen satisfactoriamente 10.000 dólares durante 10 años como multa por entrar ilegalmente, los participantes tendrían la opción de seguir trabajando como residentes legales con un visado renovable o entrar en un "Programa de Redención" de cinco años, que en última instancia proporcionaría un camino hacia la ciudadanía a las personas dispuestas a contribuir al Fondo del Trabajador Estadounidense y a estudiar inglés y educación cívica estadounidense.
A través de los diversos requisitos financieros previstos en el programa, Salazar subrayó que Washington estaría mejor equipado para aumentar la financiación de la seguridad fronteriza.
"La mano de obra indocumentada va a pagar por la seguridad fronteriza", señaló.
Aunque el Proyecto de Ley podría enfrentarse a un escrutinio en la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, una toma de posesión por parte de los republicanos en noviembre podría ayudar a sacar adelante el proyecto.
Pero, aunque Salazar cree que el proyecto de ley podría obtener apoyo bipartidista, admitió que solo "el Señor todopoderoso" sabe si su legislación podría ser aprobada en el actual Congreso.