Casera que fue asesinada, descuartizada y congelada había llamado a la policía "muchas veces" sobre su inquilina

La familia de la propietaria de una casa en Chicago que fue encontrada desmembrada en un congelador a principios de este mes dijo que su ser querido había llamado a la policía “muchas veces” sobre el inquilino acusado de su asesinato.

Los restos de Frances Walker, de 69 años, fueron encontrados en un congelador en su casa de North Side después de que un residente del edificio reportara su desaparición el 10 de octubre.

Otra inquilina, Sandra Kolalou, de 36 años, ha sido acusada de su asesinato.

Los familiares de Walker le dijeron a la estación local ABC7 que la antigua propietaria había llamado a la policía en Kolalou “muchas veces”.

Los registros muestran que la policía respondió a la casa cinco veces solo en octubre.

“Tienen derechos como inquilino pero si temes por tu seguridad o tienes problemas, el propietario debe tener derechos no solo como propietario sino también como cohabitante del dominio”, dijo la sobrina Cory Walker.

“Siento que sus manos estaban atadas o tal vez hubo algo que podría haberse hecho de manera diferente. Ha cambiado la trayectoria de nuestras vidas. Está dejando un gran vacío”.

Un fiscal en la audiencia de fianza de Kolalou el miércoles dijo que la pareja tenía una relación conflictiva que se convirtió en una pelea a gritos la noche del asesinato.

La policía también confirmó previamente que Walker había puesto un aviso de desalojo en la puerta de Kolalou el día anterior al asesinato.

“Eso muy bien podría ser lo que hizo que la acusada se enojara mucho y cometiera este acto horrible”, dijo el jefe de detectives de la policía de Chicago, Brendan Deenihan, a ABC7 en ese momento.

Además del asesinato en primer grado, Kolalou está acusada de ocultar una muerte homicida y asalto agravado con un arma mortal. Está detenida sin derecho a fianza.

También enfrentó cargos no relacionados de agresión para causar daños corporales a principios de este año.

La familia de Walker inició una recaudación de fondos en Facebook para su cremación y funeral, que se llevará a cabo el sábado.

Además de sus hermanos y familia extendida, le sobrevive su esposo, un inmigrante búlgaro que trabaja como cuidador de pacientes ancianos.

“[Walker] siempre fue muy amable y muy servicial, siempre llegaba con alegría en su corazón y estaba feliz de estar en el órgano”, Stuart Thompson, director musical de la parroquia Queen of the Apostles, donde Walker tocaba el órgano. durante más de 20 años, le dijo a ABC7.