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La hípica triunfa en París 2024: talento deportivo, gradas llenas y circuitos españoles
El Palacio de Versalles, un símbolo del Patrimonio francés reconocido en todo el mundo, fue el escenario escogido para albergar esta disciplina
Agosto 15, 2024 4:20pm
Updated: Agosto 15, 2024 4:20pm
El deporte ecuestre fue uno de los grandes protagonistas en los Juegos Olímpicos de París 2024 tras once días de competición marcados por el talento deportivo, la presencia de celebridades interesadas por la hípica, circuitos de obstáculos diseñados por un español y Versallescomo telón de fondo.
El Palacio de Versalles, un símbolo del Patrimonio francés reconocido en todo el mundo, fue el escenario escogido para albergar esta disciplina. La localización del estadio temporal, construido en la explanada ‘Etoile Royale’, al oeste del Gran Canal y en pleno corazón de los jardines, ofrecía una espectacular vista del Palacio y convirtió la arena de Versalles en uno de los lugares más icónicos de los Juegos.
Muchas entradas vendidas en la hípica
Además, París 2024 pasará a la historia de los acontecimientos ecuestres más relevantes no solo por el entorno o por los récords que dejaron varias pruebas, sino también por haber colgado el cartel de ‘sold-out’ (todas las entradas vendidas) durante más de la mitad de los días en los que se celebraron las competiciones, en un estadio con capacidad para albergar a 16.000 asistentes.
Asimismo, más de 42.000 aficionados, según datos de la Federación Ecuestre Internacional (FEI), asistieron al segundo día de Concurso Completo, que cerró los Juegos de Verano con la revalidación del título por equipos para Gran Bretaña y el tercer oro olímpico en la competición individual para el alemán Michael Jung.
Uno de los récords del deporte ecuestre vino de la mano del jinete español Juan Antonio Jiménez Cobo -medalla de plata en Atenas 2004- que, a sus 65 años, no solo fue el deportista de mayor edad en doma clásica, sino de los Juegos Olímpicos de París 2024.
De Macron a Snoop Dogg entre los asistentes
Durante las pruebas, los caballos y sus jinetes tuvieron a visitantes de postín, como el propio presidente francés, Emmanuel Macron, o el cantante Snoop Dogg, que ha tenido un gran protagonismo durante todos los Juegos Olímpicos.
El rapero estadounidense, que fue uno de los portadores de la antorcha olímpica, estuvo en el centro de entrenamiento hípico de su país junto a la empresaria y presentadora de televisión Martha Stewart, ambos ataviados como jinetes, para conocer al caballo Mopsie, que se había hecho viral por sus pasos parecidos al ‘crip walk’, un movimiento de pies propio del hiphop.
Otros famosos que estuvieron presentes en las competiciones de hípica fueron el futbolista Antoine Griezmann, la tenista Serena Williams o la pareja de actores formada por Ryan Gosling y Eva Mendes.
Los propietarios de los caballos ganadores
Aunque estas celebridades han presenciado los Juegos desde el público, otras han estado relacionadas con los propios caballos.
Por ejemplo, el futbolista alemán del Bayern de Múnich Thomas Müller es el dueño de ‘Checker 47’, el caballo con el que su compatriota Christian Kukuk ganó el oro en la modalidad de salto individual de obstáculos, en una final en la que el neerlandés Maikel van der Vleuten se llevó el bronce con ‘Beauville Z’, un equino que pertenece a la presidenta de Inditex, Marta Ortega.
Sobre Checker 47, el alemán Kukuk dijo que “realizó una actuación absolutamente excepcional” y que estaba “muy muy orgulloso” de él.
Un español, diseñador de los circuitos de salto
Los circuitos de salto tuvieron un protagonista español, anónimo para muchísimas personas, que quizá no repararon en su trabajo por la belleza del paraje del Palacio de Versalles: se trata de Santiago Varela, diseñador de circuitos de hípica y la primera persona que proyecta estos en la modalidad de salto de dos citas olímpicas, la de Tokio y la de París.
Según explicó Varela al periódico español ‘El Mundo’, en el diseño de circuitos hay que respetar las normas básicas de altura y anchura de los obstáculos, pero, más allá de eso, u objetivo personal es que los caballos “salten lo mejor posible, que se expresen en toda su plenitud. La gente piensa que la gracia es la dificultad, que haya muchos errores, pero no es así. Un buen circuito es un circuito en el que los caballos se lucen”.