Cubano asesina a su exesposa en Las Vegas y luego se quita la vida

La joven cubana Rachel Ruíz, de 25 años, oriunda de Taguasco, en Sancti Spíritus, fue asesinada por su expareja, Ubelquier Capote, de 43 años, en Las Vegas, donde ambos residían desde hacía poco tiempo. Capote se suicidó tras balear a la joven en su centro de trabajo.

Según reportes de prensa locales, Capote esperó a su expareja en las afueras de su centro laboral y le disparó en varias ocasiones, lo que le ocasionó la muerte en el acto. Luego, este se dirigió a su coche y se suicidó.

El incidente ocurrió el pasado 4 de enero en las afueras de un negocio “en la cuadra 500 de Pamalyn Avenue, cerca de las carreteras Bermuda y East Pilot”, al sur del Aeropuerto Internacional “Harry Reid”, en Las Vegas.

Según el teniente del Departamento de Policía Metropolitana Jason Johansson, la “pareja estaba en una relación a largo plazo que terminó en otoño de 2022”. El día antes del asesinato la joven Rachel había publicado una foto en la que sostenía la mano de su nuevo novio.

El policía local Johansson instó a cualquiera que se enfrente a la violencia doméstica a utilizar recursos como el Centro de Justicia Familiar del departamento de policía en lugar de soportar violencia y “llegar a esto”.

Tras el asesinato, sus familiares y allegados en EE. UU. están recogiendo fondos para enviar las cenizas de la joven a Cuba, donde residen sus padres. Víctor J. Vergara, quien era su novio al momento del crimen, explicó en redes sociales cómo se estaba realizando la colecta.

“Se está haciendo una recaudación para mi ángel Rachel para darle un último adiós y poder enviarles a sus padres sus cenizas a Cuba. Con lo que puedan ayudar se les va a agradecer siempre. Mil gracias. Mi número de ATH MÓVIL es el 702-902-6148. Zelle: Maria Luna 702-800-9944. Banco de America 501022107134”, escribió el joven en su perfil de Facebook.

Al conocer la muerte de su novia, la cubana Rachel Ruiz, el joven Víctor Vergara le dedicó unas emotivas palabras en su perfil de Facebook y aseguró que “te amaré por siempre, mi ángel”.