Policiales
Costa Rica: Niña muere por golpiza de su madre y su padrastro
Ambos fueron condenados a 35 años de prisión en noviembre
Enero 6, 2022 4:55pm
Updated: Enero 6, 2022 4:55pm
Una niña de 4 años fue asesinada por su madre y su padrastro en la ciudad de Alajuela, Costa Rica, tras recibir 47 golpes en un periodo de 15 horas. Las agresiones habrían provocado que el hígado de la menor se partiera en dos y su corazón estallara a causa de la acumulación de sangre en su abdomen.
Yuseth María Mejías Vargas, la madre de la niña, y Brayan Jacob Herrera Ayala, el padrastro, fueron acusados por el delito de homicidio calificado y recibieron una pena de 35 años de prisión.
En el relato de los hechos, la fiscal Edith Morera Rodríguez comentó que la víctima era hija biológica de Yuseth María e hijastra de Brayan, lo que los colocaba en una posición de poder y de tutoría sobre la menor agraviada.
El dictamen forense mostró que la niña sufrió laceraciones en el hígado y el corazón, así como hematomas en la cabeza, extremidades superiores, glúteos y piernas. También se detalló que la menor sufría agresiones repetidas desde hace tiempo, pues presentaba marcas de lesiones anteriores.
La pequeña vivía junto con sus otros hermanos y falleció el 15 de enero de 2020.
"La médico forense indicó que el golpe letal que le dieron fue en el abdomen, le laceró el hígado y se lo partió en dos y dejó sangre en el abdomen, de tal manera que era tanta sangre que le subió al corazón y se lo explotó. No era una muerte por una caída", informó Ana Yanci Umaña, juez del Tribunal Penal de Alajuela.
La jueza señaló que según la descripción de los especialistas que participaron en el caso, el golpe que causó la muerte a la menor fue en el abdomen.
Yuseth y Brayan fueron condenados en noviembre pasado, reporta La Nación. Al dictarse la pena de prisión, la juez Umaña recordó que la pareja alteró la escena del crimen para tratar de ocultar los hechos.
Desaparecieron la sábana y una almohada de la cama donde murió la menor, además de hacer otras alteraciones en la escena. No obstante, los forenses encontraron otros rastros de sangre que les permitieron demostrar que la menor era golpeada y no falleció a consecuencia de una caída, tal como declararon los acusados.
En 2018, la entonces presidenta ejecutiva del Patronato Nacional de la Infancia, Patricia Vega, reconoció que conocían del caso, pero no lo abordaron de manera adecuada. La Fiscalía abrió una investigación para determinar la responsabilidad de ese ente estatal, según el citado medio.