Amnistía Internacional pide al gobierno chino no detener a manifestantes pacíficos

La organización de derechos humanos, Amnistía Internacional, pidió al gobierno chino que no detenga a los manifestantes pacíficos que participan en las protestas sin precedentes del país contra los duros cierres por el COVID-19.

En un comunicado emitido el domingo, la organización elogió a los ciudadanos que se levantaron en apoyo del mortal incendio de un edificio en Urumqi, la capital de la provincia de Xinjiang, en el extremo occidental del país, y defendió su derecho a la protesta no violenta.

"La tragedia del incendio de Urumqi ha inspirado una notable valentía en toda China. Los manifestantes pacíficos sostienen papeles en blanco, cantan consignas y participan en muchas formas de disidencia creativa”, declaró la directora regional adjunta de Amnistía Internacional, Hana Young. "Es prácticamente imposible que la gente en China proteste pacíficamente sin enfrentarse al acoso y la persecución. Las autoridades han mostrado tolerancia cero con la oposición, especialmente en los últimos 10 años bajo el mandato del presidente Xi, pero esto no ha detenido las protestas."

"En lugar de penalizar a la gente, el gobierno debería escuchar sus peticiones. Las autoridades deben dejar que la gente exprese sus pensamientos libremente y proteste pacíficamente sin miedo a las represalias”, agregó.

El incendio de Urumqi se hizo viral en las redes sociales chinas porque los internautas creen que las 10 muertes se debieron, en parte, a un cierre parcial del edificio como medida de precaución por el COVID-19.

Las autoridades locales han cuestionado esta afirmación, pero ello no impidió que estallaran las protestas en Urumqi. Desde el 25 de noviembre, los videos de las redes sociales han mostrado manifestaciones en universidades y ciudades de China, como Pekín, Guangdong, Shanghái y Wuhan, según Amnistía Internacional.

Los manifestantes han reclamado una normativa menos restrictiva sobre el COVID y más libertad frente a la censura estatal.

"Nos oponemos a estas restricciones de los derechos de las personas en nombre de la prevención del virus, y a las restricciones de la libertad individual y de los medios de vida de las personas", indicó a Reuters Jason Sun, estudiante universitario de Shanghái.

Los videos también han mostrado a algunos manifestantes siendo detenidos, incluyendo al menos a una mujer en Urumqi por "difundir rumores".

"Desgraciadamente, el libro de jugadas de China es demasiado predecible", dijo Young en el comunicado de Amnistía Internacional. "La censura y la vigilancia continuarán, y es muy probable que veamos el uso de la fuerza por parte de la policía y las detenciones masivas de manifestantes en las próximas horas y días. También cabe esperar largas condenas de prisión contra manifestantes pacíficos."