Boric critica ante la ONU a regímenes de Venezuela y Nicaragua, pero omite violaciones de DDHH en Cuba

El presidente de Chile, Gabriel Boric, denunció este martes ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) "la crisis humanitaria en Venezuela" y  la situación de "los presos políticos de Nicaragua".

Durante su intervención, Boric aseguró que “la crisis humanitaria en Venezuela, producto de su prolongada crisis política, ha generado un flujo migratorio que es inédito en nuestra región y en nuestro país, poniendo una presión tremenda sobre nuestras instituciones y nuestra sociedad”.

El mandatario chileno también se refirió a la dramática situación en Centroamérica a causa de la dictadura de Daniel Ortega, e instó a las naciones a "seguir trabajando para contribuir a la liberación de los presos políticos en Nicaragua".

El líder izquierdista abogó por el fortalecimiento de los sistemas democráticos e indicó que los problemas que aquejan a las distintas sociedades pueden resolverse con "más democracia y no con menos".

"El camino para enfrentar los problemas que aquejan a nuestras sociedades se pavimenta con más democracia y no con menos, incentivando la participación y no restringiéndola, fomentando el dialogo y jamás censurándolo y, sobre todo, respetando a quien piensa distinto", señaló. 

Sin embargo, Boric en su discurso no hizo referencia a las violaciones de derechos humanos del régimen de La Habana.  Según organizaciones de DD.HH en Cuba hay más presos políticos que en Venezuela y Nicaragua juntos. 

Prisoners Defenders (PD) registró en el mes de agosto cientos de detenciones arbitrarias en la isla y 43 nuevos casos de prisioneros políticos, para un total de 1016.

El periodista y académico cubano, José Raúl Gallego, cuestionó en Twitter “por qué [el presidente de Chile] habla de violaciones de derechos en América Latina y no menciona a Cuba, no solo la dictadura más longeva del hemisferio, sino también con responsabilidad en lo que ocurre en Venezuela y Nicaragua?”. “¿Le teme a algo? ¿Pesa más la ideología que la honestidad?”, afirmó.

Boric, un exlíder estudiantil que el pasado diciembre se convirtió en el presidente más joven de la historia chilena, subrayó además en su discurso en la ONU que "tener opiniones distintas no nos vuelve enemigos".

Además, se refirió a la situación política de Chile, tras el rotundo rechazo en las urnas de la propuesta de nueva Carta Magna que podría poner en peligro el sistema de libre mercado del país.

"Algunos han querido ver el resultado del plebiscito como una derrota para mi Gobierno. Nunca un Gobierno puede sentirse derrotado cuando el pueblo se pronuncia", destacó.

El mandatario progresista alertó además, que ningún país está exento de sufrir una crisis social como la que vivió Chile en 2019 porque "la desigualdad es una amenaza latente para la democracia" y pidió anticiparse a la "injusticia social".

Boric también mencionó "la injusta guerra de agresión desatada por Rusia en Ucrania" y la emergencia climática, como lo hizo su homólogo colombiano, Gustavo Petro, quien calificó ante la ONU de "hipócrita" el discurso de los países desarrollados para salvar la selva tropical.

La 77° Asamblea General de la ONU fue inaugurada por el secretario general del organismo, Antonio Guterres, quien dio inicio a su discurso asegurando que el “mundo está en grandes problemas” y denunció la dramática situación que se vive en Ucrania tras la invasión rusa.